lunes, 9 de mayo de 2011

la resolución de la crisis europea....

  Puede estar empezando. Como ya escribí en su día, el tema de los rescates a los paises parecía solo una solución del tipo poner una tirita a una herida de bala. Puede que a corto plazo puedas frenar algo la hemorragia, pero sin las medidas adecuadas (extracción de la bala y sutura) lo más probable es que el individuo se desangre y muera.

   Los rescates del BCE y del FMI fueron algo así como transfusiones de sangre a un cuerpo malherido. Lo que se inyectaba por un lado, se perdía por otro. La resolución final ha sido la de malgastar litros y litros de sangre que podrían haber venido bien para otros pacientes sin curar ni tratar de cicatrizar las heridas que tenía el cuerpo herido. Al final y con el paso del tiempo, el cuerpo herido necesita más sangre para mantenerse con vida y lo peor es que el BCE está cada vez más presionado para no darsela, con lo cual el cuerpo al final morirá.

  Quizá el simil no sea demasiado adecuado, pues Grecia no creo que vaya a morir, pero salvando ese pequeño detalle, el resto se adapta bastante bien. Los prestamos que hicieron tanto el BCE como el FMI a Grecia no han servido de nada. Grecia está cada vez más cerca de la insolvencia. Sus bonos y sus CDS así lo demuestran. Se gastaron 110 mil millones de € en intentar un rescate a Grecia. Dinero que ha salido del bolsillo de los contribuyentes europeos. Sobre todo los alemanes. Otra inyección podría demorar la resolución final otros cuantos meses, quizá unos años. Pero cada vez hay más oposición de las sociedades (sobre todo las nórdicas) hacia dichas políticas. La presión sobre los políticos alemanes, holandeses, finlandeses, franceses y asutriacos cada vez más va a estar en el sentido de no gastar más dinero en rescates y de que como dirian en muchos pueblos españoles, "que cada perro se lama su pijo" (quizá la expresión sea un poco vulgar, pero es la mar de expresiva).

   Sin embargo esto deja con pocas opciones a los griegos. Lo cierto es que nunca tuvieron muchas opciones, simplemente ahora se hace visible lo evidente. Y es que sin nuevo dinero y con los tipos de interés en su deuda pública rondando el 20% (bonos a 2 años) la ausencia de nuevas inyecciones de capital solo les deja a los griegos el camino del impago. O como se dice hoy en día de manera más suavizada, la reestructuración de la deuda. Lo cierto es que era el camino a haber tomado hace ya más de un año. Pero las altas cúpulas del poder europeo prefirieron no tomarlo habida cuenta de que ello provocaría más problemas bancarios en el resto de Europa. Este impago se puede hacer de dos maneras:

  1. dejando el Euro. Es el método que está hablando toda la oficialidad europea. Por un lado salen altos cargos públicos diciendo que sería lo mejor para Grecia y por otros salen altos cargos griegos y del BCE diciendo que no está en los planes y que no se contempla. Desgraciadamente ambos hechos parecen señalar que será la opción elejida, aunque a mi entender no es la mejor de las opiciones. La teoría es que si Grecia se sale del Euro y retoma el Dracma, podrá devaluar libremente. Algunos dicen que el Dracma se podría llegar a devaluar más de un 50% en muy poco tiempo. Esa devaluación inplicaría mejor competitividad para los sectores productivos griegos de cara al exterior, pero también mayores precios a la importación.
  2. El segundo camino es la reestructuración de la deuda. Dicha reestructuración vendría o bien como recorte en la cantidad total de deuda a devolver (reducción total de la deuda) o bien como aumento de los plazos para devolverla o bien como una reducción de los tipos de interés que debe pagar la deuda actual. Yo me inclino en pensar que lo más adecuado sería una conbinación de las tres. Quizá las dos últimas serían las mejor aceptadas aunque la primera es la que solventaría los problemas griegos más deprisa.
   Ambas soluciones ponen presión sobre el resto de los paises del club Med (España, Portugal, Irlanda y quizá Italia), sobre los bancos comerciales de dichos paises y sobre los bancos comerciales alemanes, franceses e ingleses que prestaron tanto a gobiernos como a bancos comerciales del club Med. Esto último es lo que yo creo que más preocupa al BCE. El riesgo de un contágio sistémico a lo largo de todo el sistema financiero europeo. Contagio que dejaría el 80% de la banca comercial europea insolvente y muchos depósitos y ahorros de ciudadanos europeos volatilizados.

  Como digo más arriba creo que se está optando por la primera opción, es decir, que Grecia abandone el Euro y devalue su nueva moneda, el Dracma. De ser así, los  ahorradores griegos serían borrados del mapa. Todo aquel con una cuenta corriente o de ahorro en un banco vería como lo que hoy son por ejemplo 1000 € (que al cambio de 2001 eran 340.750 Dracmas) seguirían siendo la misma cantidad de Dracmas pero en una semana (más o menos) pasarían a ser 750 € y en un mes 500 €. Todo producto importato sería más caro en dicho porcentaje. Solo los productos fabricados en su mayor parte dentro de Grecia mantendrían mejor su precio. El significado último de este proceso es que el griego medio acabe pagando el pato. Ocurriría algo parecido a lo que ocurrió en Argentina en el 2001 cuando el corralito. Bancos cerrados para evitar que los griegos los descapitalicen dichos bancos intentando recuperar sus ahorros.

   El problema de intentar que solo una parte implicada en un desastre cargue con todas las culpas es que a la larga dicha parte se revela y acaba por no solucionarse el problema. El problema griego es que su gobierno gastó más de la cuenta durante los años del boom. Gastó en beneficio propio, seguro, pero también en beneficio de su sociedad. Gasto social, puentes, carreteras, seguiridad social, retiros, hospitales, escuelas, etc. Más de lo que dicha sociedad se podía permitir. Hoy eso se hace evidente que gastaron más de lo que se podían permitir. A parte de quien tenga o deje de tener la culpa, lo más productivo sería intentar buscar una solución a dicho problema. O sea, que el gobierno griego tiene una cantidad de deuda que no va a a poder pagar. El intentar cargar la solución del problema solo en las espaldas de unos de los responsables de dicho problema (la sociedad griega) creo que es una visión miope de la solución. Abocan a la sociedad griega hacia el conflicto o interno o con otros paises. Para mi, la solución ha de ser más equitativa y justa.

  Cuando dos personas llegan a un acuerdo de que una le presta una cantidad de dinero a la otra, ambos deben asumir un riesgo. El acreedor (el que presta) a que el deudor (el que se endeuda) no le page de vuelta la deuda o los intereses. Y el deudor debe poner algo como aval para cubrir parte del riesgo que corre el acreedor, así ambos están motivados a hacer lo correcto. El acreedor a prestar solo en condiciones en las que pueda recuperar la inversión y el deudor a solo endeudarse hasta niveles que no pongan en riesgo el resto de su patrimonio. A la hora de que, por el motivo que sea, el deudor no pueda hacer honor a su deuda, ambos deben hacer frente a sus pérdidas ejecutando el aval. Quizá el aval debería ir reduciendo su valor conforme la dueda fuera siendo pagada, para así, en cualquier momento de la vida de la deuda, ambas partes del contrato se vean motivadas a llevarlo a fin.

  Trasladando la teoría anterior al ejemplo griego (o al español cuando nos toque a nosotros), creo que lo justo es que paguen tanto la sociedad griega por dejar que su gobierno gastase más de la cuenta, como los bancos que prestaron a dicho gobierno, por no valorar adecuadamente los riesgos que tomaron cuando prestaron a dicho gobierno. Los planes del BCE hasta la fecha van encaminados a que los bancos no paguen por su mala gestión del riesgo. Eso pone demasiada presión sobre la otra parte, en este caso la sociedad griega que llegado un determinado punto puede que explote y decida actuar de manera más drástica. Por ejemplo, montando algún tipo de revolución (puesto que todo partido político de occidente hoy en día está cortado por el mismo patrón y un cambio de gobierno no significa un cambio de política) más hacia la izquierda o más hacia la derecha en el cual se busque una solución drásica del problema. Se impaga todo y se empieza de cero. Eso, sin duda traería tensiones internacionales graves, que aunque no creo que acabaran en guerra a corto plazo, podrían sembrar las semillas de conflictos intraeuropeos para la década próxima. A parte de quebrar medio sistema financiero europeo y de provocar (con un alto porcentaje de probablidad) un segundo credit crunch dentro de la crisis que estamos viviendo.

  Podría seguir escribiendo sobre el tema, pero este post ya se ha alargado demasiado. No quiero parecer demasiado catastrofista, hablando todo el tiempo de guerras y de conflictos internos, pero lo cierto es que las politicas desarrolladas hasta la fecha fomentan la visión social de injusticia y dicha visión polariza la sociedad. Las sociedades polarizadas, ya sea a nivel interno o a nivel supranacional europeo o mundial, tienden a generar conflictos, sobre todo si hay semillas de infelicidad en las mismas, como ocurre con las crisis económicas. Es por eso que se deben solucionar las crisis de manera rápida y sobre todo justa, para intentar evitar dichas polarizaciones. Un saludo

2 comentarios:

  1. Muy acertado Jc, como siempre, pero creo que como dices más arriba la sociedad ya aportado su granito de arena, que debe aportar un poco más, pero el que deverdad debería arrimar el hombro para salir de esta crisis es el sector financiero que a yudado a que entremos sin mirar sus riesgos como lo hizo la sociedad.
    A demás me gustaría resaltar que ahora es que cuando salen a la luz toda esta clase política oportunista que serán a los que más tenemos que vigilar para que no arrastren a la generalidad del pueblo con consignas ultraderechistas o izquierdistas que ya sabemos a lo que desenbocan estas ideologías.
    un saludo y congratulaciones por tu artículo.

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  2. Gracias por el feedback. De verdad que lo agradezco mucho. Un saludo

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